Realmente nos hemos parado a pensar los padres si tienen verdaderamente Ocio y Tiempo libre?. Nuestros hijos en cuanto comienzan la temporada escolar sus agendas las repletamos de actividades. Entre las horas lectivas, horas de refuerzo y algún deporte en recintos acotados mientras los padres trabajamos e incluso cuando llegamos a nuestras casas ya tarde, seguimos con las tareas escolares. Es todo un ciclo de estrés familiar que se convierte en un ambiente tenso porque queremos que nuestros hijos sean perfectos, sean los más listos porque nos recomiendan que tienen que coger hábitos de responsabilidad desde que son muy pequeños, de no ser así, no llegarán a tener un futuro. Y eso nos preocupa en cuanto a los padres porque queremos lo mejor para nuestros hijos.
Resumiendo si reflexionamos nos damos cuenta que hasta el juego se lo tenemos programado y si es posible que sean educativas. Al final de todo, nuestros hijos no tienen su espacio de libertad, sus juegos al aire libre, que se inventen ellos mismos sus aventuras y que exploren su entorno. Y pienso que
jugar con sus amigos horas y horas o incluso solos en espacios libres y naturales en un entorno normal es donde los niños deberían crecer y aprender. Y que un niño en algún momento se sienta solo no es malo porque aprende otra sensación, la soledad.
De echo me atrevería a decir que aprenden tanto o más que en algunas clases escolares.
A nosotros obviamente con nuestras jornadas se nos hace en algunas ocasiones inviable y si bien lo delegamos a terceros. Por ello entendemos que necesitamos esos espacios al aire libre y naturales, pues es el entorno natural donde nuestros niños deberían crecer y aprender.
